Un sabor agridulce, con un equilibrio tentador entre las notas cítricas de Aperol y la efervescencia burbujeante.

Es una mezcla de intensidad y simplicidad, donde el sabor distintivo de la Cachaça (el destilado de caña de azúcar brasileño) se exalta al combinarse con la acidez vivaz de la lima fresca y el toque de dulzura.

Fusiona un whisky escocés de carácter robusto (como el Johnnie Walker Black) con la dulzura compleja de un licor de miel y hierbas. El resultado es un perfil de sabor rico, cálido y especiado, con un suave eco cítrico que equilibra su intensidad.

Ron blanco, que actúa como base limpia para que la acidez del limón (o lima) y la dulzura de la fruta elegida brillen en armonía. Ofrecemos versiones irresistibles y refrescantes, por ejemplo:

- Maracuyá: Acidez exótica y toque tánico.
- Mango: Dulzura untuosa y tropical.
- Frambuesa: Chispa ácida y aroma intenso.

Ginebra, con su carácter botánico y herbáceo dominado por el enebro y el agua tónica, que aporta la efervescencia y un toque amargo y cítrico gracias a la quinina.

Este cóctel francés eleva la experiencia de la copa de espumante combinando las burbujas con la riqueza afrutada de la crème de cassis (licor de grosella negra).

Una acidez fresca y crujiente del espumante y una dulzura natural y seductora de la fruta.

Johnnie Walker etiqueta roja: Ofrece una experiencia accesible que comienza con una explosión de especias vivaces, seguida por notas suaves de malta dulce y un distintivo y persistente toque ahumado.

Johnnie Walker etiqueta negra: Compuesto por whiskies añejados por un mínimo de 12 años.

La dulzura de la vainilla y el caramelo cremoso, entrelazada con sabores de frutos oscuros y secos. El final es largo y característico, con un persistente y sutil humo especiado que le confiere su inconfundible profundidad.

Construido sobre la base ligera y nítida del ron blanco, que se fusiona magistralmente con la acidez vivaz de la lima fresca.

El protagonista sensorial es la menta (o hierbabuena), que se activa para liberar un aroma intensamente refrescante y herbal. Completado con azúcar y un toque de soda.

Mantiene la base esencial de ron blanco, lima y menta vibrante, pero la eleva con la incorporación de frutas:

- Maracuyá: Aporta una acidez tangy y un perfume tropical intenso.
- Mango: Otorga una dulzura untuosa y profunda.
- Frambuesa: Añade una chispa ácida y un color intenso.

Servido tradicionalmente en una icónica jarra de cobre, el Moscow Mule es un cóctel moderno y excepcionalmente refrescante. Su perfil de sabor es una poderosa tríada de ingredientes:

El vodka aporta una base limpia y nítida. La lima fresca introduce una acidez brillante y cítrica. La cerveza de jengibre (ginger beer) es la protagonista, ofreciendo un dulzor especiado y un golpe picante (o pungent) característico.

Este destilado se fusiona con la acidez brillante y recién exprimida del limón (o lima), contrarrestada por el dulzor del jarabe. El toque maestro es la clara de huevo, batida hasta lograr una capa de espuma aterciopelada y sedosa que suaviza cada sorbo. Finalizado con unas gotas de amargo.

Mantiene la base esencial del Pisco y la clara de huevo para conservar la textura espumosa y sedosa. La clave es el maracuyá, que sustituye gran parte del cítrico tradicional, aportando una acidez exótica, así como un aroma intensamente perfumado y tropical.

Conserva la textura sedosa y espumosa característica gracias a la clara de huevo y la base del pisco, pero su perfil cítrico es sustituido por la fruta tropical. El mango maduro inyecta una dulzura profunda, cremosa y untuosa que equilibra perfectamente la acidez residual de la lima.

Este cóctel mantiene la estructura cremosa y la base de pisco, pero la pulpa de frambuesa dota al trago de un color intenso y un perfil de sabor complejo. La frambuesa aporta una chispa ácida más marcada, que se mezcla deliciosamente con un dulzor natural e intenso.

El Pisco Sour Catedral no es una variación de sabor, sino un tamaño más grande. La base es el pisco, con su aroma a uva. La acidez viva del limón/lima y la dulzura del jarabe se mantienen en perfecto equilibrio. La clara de huevo emulsionada corona el trago con su capa de espuma suave y aterciopelada.

Sabor con la dulzura profunda, cremosa y untuosa del mango maduro se fusiona con la base aromática del pisco, resultando en un sour suave y menos ácido que la versión tradicional de limón.

La maracuyá da una acidez, más intensa que el limón, que se equilibra con la dulzura para crear una explosión de sabor tropical. La base de pisco y la clara de huevo batida aseguran el cuerpo sedoso y la espuma aterciopelada en cada sorbo.